sábado, 27 de febrero de 2010
Siete reglas simples para esconderse en la vida
Uno. Nunca confies en un policía con piloto.
Dos. Ten cuidado con el entusiasmo y el amor. Ambos son temporarios y se van enseguida.
Tres. Si te preguntan si te preocupan los problemas del mundo, mira bien a los ojos de quien pregunta. No te volvera a preguntar.
Numero cuatro y cinco. Nunca reveles tu verdadero nombre, y si alguna vez te dicen que te mires a ti mismo, nunca lo hagas.
Seis. Nunca digas ni hagas nada que la persona frente a ti no entienda.
Y siete. Nunca creas nada. Será malinterpretado, te atrapará y te seguira por el resto de tu vida. Y nunca cambiará.
miércoles, 17 de febrero de 2010
.
viernes, 12 de febrero de 2010
Y todo lo que debes que hacer es ponerte los auriculares,
echarte en el suelo y escuchar el CD de tu vida,
canción tras canción,
ninguna se puede saltar,
todas han pasado y todas,
de una forma u otra,
servirán para seguir hacia adelante.
No te arrepientas,
no te juzgues,
sé quien eres y no hay nada mejor en el mundo.
Pause,
rewind,
play,
otra vez y otra y otra.
Nunca detengas tu reproductor,
sigue grabando,
mezclando los sonidos para lograr explicar el caos que tienes dentro.
Y si te sale una lágrima cuando las escuchas,
no tengas miedo,
es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida...
echarte en el suelo y escuchar el CD de tu vida,
canción tras canción,
ninguna se puede saltar,
todas han pasado y todas,
de una forma u otra,
servirán para seguir hacia adelante.
No te arrepientas,
no te juzgues,
sé quien eres y no hay nada mejor en el mundo.
Pause,
rewind,
play,
otra vez y otra y otra.
Nunca detengas tu reproductor,
sigue grabando,
mezclando los sonidos para lograr explicar el caos que tienes dentro.
Y si te sale una lágrima cuando las escuchas,
no tengas miedo,
es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida...
sábado, 6 de febrero de 2010
Descubriendo Nunca Jamás
De Cuando el primer niño rió por primera vez, su risa se rompió en mil pedazos que saltaron por los aires en todas direcciones, y así fue como aparecieron las hadas. Por eso debería haber un hada para cada niño y cada niña. Aunque hoy en día los niños saben tantas cosas que dejan de creer muy pronto en las hadas, y cada vez que un niño dice "yo no creo en las hadas", en alguna parte cae muerta un hada.
Los niños nunca deberían ir a la cama, cuando despiertan son un día más mayores.
Los niños nunca deberían ir a la cama, cuando despiertan son un día más mayores.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)